¿QUE ES LA MEDIACIÓN?

 

Todos en algún momento en nuestras relaciones familiares, sociales, laborales, comerciales, etc. tenemos conflictos o disputas que, en ocasiones, terminan en los tribunales o cortes arbitrales, donde un tercero decide cómo se va a resolver ese conflicto, quedando normalmente una parte como vencedora y otra como vencida.

La Mediación es un método que permite la resolución de conflictos de manera pacífica y voluntaria, a través del diálogo entre las partes, donde el mediador, como tercero neutral e imparcial, regula el proceso de comunicación entre ellas y las acompaña para que sean ellas mismas, como protagonistas, las que encuentren las soluciones que consideren más beneficiosas.

La Mediación tiene una larga trayectoria aunque su utilización en España ha sido escasa, seguramente por desconocimiento de la misma por las partes en conflicto.

 

¿QUE CONFLICTOS PUEDEN SER RESUELTOS MEDIANTE LA MEDIACIÓN?.

Tanto las disputas vecinales como los procesos de separación o divorcio; conflictos entre alumnos de un colegio, o entre estos y sus profesores; conflictos generacionales por discrepancias entre padres e hijos o por el proceso de sucesión de la empresa familiar ; aquellos que surgen del reparto de una herencia o los que aparecen entre sociedades mercantiles por incumplimientos de sus acuerdos, etc. La Mediación puede adaptarse a todo tipo de divergencias, sea cual sea su complejidad.

 

¿QUE VENTAJAS REPRESENTA LA MEDIACIÓN FRENTE A OTRAS FÓRMULAS DE RESOLUCIÓN DE CONFLICTOS?.

 La Mediación es un proceso

1. Ágil

La Mediación es un proceso de fácil acceso y rápido, llegándose a poder resolver el conflicto, en ocasiones, en una sola sesión. No obstante, lo normal es que se necesiten dos o mas sesiones, siendo éstas fijadas de mutuo acuerdo entre las partes y el mediador.

 2. Confidencial

Toda la información y comunicaciones que se revelan durante el proceso de mediación son confidenciales tanto para las partes, como para el mediador o mediadores. Tanto los documentos, como las manifestaciones realizadas por los participantes en la misma no pueden revelarse a terceros ni, por supuesto, ser utilizadas en un procedimiento judicial.  Por ello, el mediador no podrá ser citado como testigo a un juicio en un proceso civil entre las partes mediadas.

 3. Voluntario

La Mediación es un proceso voluntario, y son las partes las que deciden participar en él o abandonarlo si consideran que no es el más apropiado para dar respuesta a sus necesidades o intereses. La participación en un proceso de mediación no impide que las partes, una vez concluido dicho proceso sin alcanzarse un acuerdo, o una vez abandonado el mismo, puedan recurrir a cualquier otro sistema, como lo puedan ser la vía judicial o la arbitral.

 4. Facilita la comunicación entre las partes

La Mediación genera un clima de confianza y la apertura del diálogo pacífico y constructivo de las partes.

 5. Otorga protagonismo

Son las partes, como interesadas, las que asumen el protagonismo de su proceso, frente al proceso judicial, donde es un tercero, el juez, quien toma la decisión que considera más adecuada de conformidad con las leyes vigentes.

 6. Satisfactorio

Son las partes las que, en su caso, llegarán a un acuerdo. Ningún tercero decide por ellas y, por tanto, existe un mayor índice de cumplimiento de los acuerdos alcanzados a través de un proceso de mediación, ya que las partes han adquirido el compromiso que han considerado más justo y asumible, lo que las hace más propensas a aceptar y cumplir sus propias decisiones frente a las decisiones impuestas por terceros ajenos al conflicto.

 7. Económico

Es un proceso menos costoso que un procedimiento judicial o arbitral, no solo en cuanto a la parte económica, sino también es más económico en tiempo, en esfuerzo invertido y en energías consumidas. La Mediación mira hacia el futuro y por tanto, se podrán alcanzar acuerdos que permitan la continuidad de las relaciones entre las partes.

 8. Flexible

En cuanto a contenidos, formas y procedimiento: La Mediación puede adaptarse a todo tipo de divergencias, sea cual sea su complejidad. El proceso de Mediación se adaptará al conflicto en cuestión, a diferencia de los procesos judiciales donde es el conflicto el que debe acoplarse a los parámetros legales preestablecidos.

 

Por tanto podemos decir que la Mediación es un procedimiento voluntario de gestión o resolución de conflictos o toma de decisiones, económica, en el que las partes solicitan y aceptan la intervención de un mediador y/o mediadores profesionales, imparciales, neutrales y sin capacidad para tomar decisiones por ellas ni imponer las mismas, recuperando o favoreciéndose vías de comunicación y buscando acuerdos consensuados, que las partes adaptan a sus intereses, logrando una mayor satisfacción para ambas que revierte en su cumplimiento.